martes, 17 de marzo de 2009

Dolmen

DOLMEN, DOLMEN Editoriaal, Editor, Vicente García


Desde hace tiempo tenía deseos de rendir homenaje a Dolmen. No es que esté de acuerdo con todo lo que ha publicado. De hecho, alguna cosilla hasta me ha ofendido un poco. Además, los comiqueros no son sólo quinceañeros, veiteañeros o treintaañeros, y los comiqueros de cierta edad, se me han quejado del tamaño minúsculo de la letra. Pero, menudencias a parte, Dolmen proporciona una información sobre el cómic muy difícil de mejorar, sobre todo, con su constante actualización sobre las novedades del cómic en http://www.dolmeneditorial.com/. Y no sólo información.

El Correo Megalítico, es ilustrativo de cómo pensamos los comiqueros de a pie. Ciertamente las cartas tienen un valor muy desigual, pero casi todas merece la pena leerlas, así como las observaciones que les hace la propia revista. Noticias Breves y curiosidades, resulta de obligada lectura y Reseñas Relámpago, aunque también presenta contenidos de valor desigual, todas ellas dan noticia suficiente para saber si merece la pena comprar o no el cómic en cuestión.La parte más formativa de entrevistas, artículos, etc. reconozco que, salvo alguna excepción, los leo todos.

En resumen, que una revista que ha visto cerrar, a derecha y a izquierda, otras revistas, también buenas (la razón de porqué fracasaron,desde mi punto de vista, puede ser objeto de otro comentario), es digna de reconocimiento, especialmente, por la labor que hace a favor del cómic desde la doble perspectiva a la que he aludido antes: la información y la formación, si bien, es claro, que predomina la primera. En fin, mi deseo de una larga singladura para Dolmen, conservando la misma calidad y mi enhorabuena a su equipo, que trabaja como si fueran el triple de los que son.

lunes, 9 de marzo de 2009

Oeste


Charlie y Giraud, "BLUEBERRY. La mina del alemán perdido", NORMA Editor

Querido José Manuel:

Me pedías que te recomendara un cómic original sobre el Oeste. Pues bien, uno de los cómics que me más me han gustado, es "Blueberry". Su guionista, Charlier, es un narrador excepcional, amén de un documentalista riguroso y un gran creador de historias.

Por su parte, "Blueberry", cuyos rasgos faciales te recordarán al actor francés Belmondo, está dibujado por Giraud, que en su tiempo rompió moldes y creó un protagonista con barba de tres días, poca higiene, desordenado, incongruente a veces, con defectos, pero que te resultará, como a todos, un personaje simpático.

Esta serie de "Blueberry" merece la pena que la trate con mayor detalle. Por eso en un futuro próximo comentaré mis episodios preferidos de este personaje.

jueves, 5 de febrero de 2009

Esther

Carlos Portela (guionista) y Purita Campos (dibujante), "Las nuevas aventuras de Esther", Ed. Glénat.

No sé si existen dibujos masculinos y dibujos femeninos, pero si es así, el dibujo de Purita Campos corresponde a los segundos. Nos encontramos ante el clásico del cómic femenino español con proyección y buena aceptación internacional. No recuerdo ahora ningún cómic dirigido al lector femenino que haya tenido tanto éxito y haya influido tanto como "Esther y su Mundo", que empezó a publicarse en España en 1974 y que ahora veinte años después de su desaparición vuelve a publicarse, pero ya Esther no es una adolescente sino que tiene treinta años, casada y separada y con una hija. Los años han cambiado algo a Esther, pero sigue con sus aisladas explosiones de mal genio, a pesar de su timidez, continúa tan insegura y femenina como cuando era adolescente.

El guión de Carlos Portela es excelente y sus recursos al pasado decididamente acertados. El cómic se lee con verdadero interés y su final abierto, unido a su suspense, hacen desear la publicación del próximo número.

De Purita Campos ya se ha dicho todo sobre ella, su dibujo, su capacidad para crear personajes (el uso de la acuarela para colorear, un acierto), vestirlos y ambientarlos, y todo lo que se ha dicho es bueno. Me uno a esos juicios.

Le pedí a algunos amigos y conocidos, que a su vez se lo pidieron a otros, que leyeran mi blog. Me reuní con ellos hace días y salvo una excepción todos consideraron muy favorablemente el blog, si bien me hicieron valiosas sugerencias que pienso incorporar. La primera de ellas vino de tres sobrinas veinteañeras de uno de estos amigos, que, después de leer el blog, quieren leer algún cómic y que les recomendara uno. Cumplido está vuestro deseo. "Las nuevas aventuras de Esther" y "Esther y su Mundo" (que está siendo reeditado) me parece el mejor cómic "femenino". Por tanto queridas sobrinas (aunque no os conozco) , abandonar un poco la televisión, los móviles, Internet, etc. y disfrutar con este cómic que, aunque es cierto que tiene algún defectillo que no he expuesto, sé que disfrutaréis con él.

lunes, 2 de febrero de 2009

Berlín. Ciudad del humo

Ed. ASTIBERRI




Estamos ante uno de los cómics más ambiciosos de los últimos años (se trata de una trilogía de la que hasta el presente se han publicado dos tomos). Es una pena que la mayor parte de las viñetas tengan una letra tan pequeña, porque es un cómic que interesa a todas las edades y la tercera edad normalmente ha perdido alguna agudeza visual. En efecto, el cómic constituye un retrato certero del Berlín de entreguerras, de la República de Weimar. Si bien los personajes son de ficción los hechos relatados son rigurosamente históricos.

El dibujo, ligeramente inspirado en la línea francobelga, posee personalidad propia. La ausencia de fondos durante una serie de viñetas y la repentina aparición de los mismos, resulta normalmente un verdadero acierto.

El ambiente que se debió vivir en Berlín durante esa época está decididamente logrado a través de las peripecias de sus variados personajes: negros, judíos, homosexuales, periodistas, burócratas, ricos, pobres, religiosos, no creyentes, políticos, etc. Especialmente afortunada es la descripción del enfrentamiento entre comunistas y nacionalsocialistas. Y todo ello con un ritmo lento, pausado, en el que la exposición de las ideas muestra su influencia en el comportamiento de los distintos grupos de berlineses

Os aconsejo que hagáis lo que yo: que leáis el cómic dos veces para saber, en todo momento, quién es quién. Es de notar que el ambiente de decadencia de la República de Weimar está tan bien reproducido que el cómic deja un regusto de amargura y dureza.

lunes, 26 de enero de 2009

Antropomorfismo

David Rubín, La tetería del oso malayo, Ed. ASTIBERRI


Estamos ante un cómic de cuentos o fábulas difícil de superar. Se trata de literatura hecha dibujo o, mejor, de dibujo literario, tal es la adecuación del dibujo al texto. En este sentido, en próximas ediciones, que supongo que las habrá, merece la pena corregir algunas erratas, como, por ejemplo, la de la página 78, que sustituye la x de excusa por una s.

Los cuentos o fábulas son algo desiguales, así como el dibujo, destacando el titulado, Antón en llamas. Pero son diferencias mínimas dentro siempre de un dibujo excelente.

Ya dice en la primera viñeta de la segunda página de Detrás de la barra que la tetería "en realidad es un consultorio psico-anímico". En efecto, el esquema de narración que aparece en este primer cuento, con pocos matices, es el que se sigue en los siguientes: partiendo de una situación casi desesperada se termina con una estupenda esperanza. Y es que el dueño de la tetería, Sigfrido es un personaje todo bondad y sobre todo comprensión, en el que no existe un adarme de maldad. Todos quisiéramos tener un amigo así.

Los personajes nos permiten reconocer a personas que tratamos y a nosotros mismos. Sin embargo, echo de menos algunos personajes, y si alguna vez hablo con David Rubín se los diré, porque resulta un poco larga su justificación. En todo caso, pienso que seguirá con estos cuentos de la tetería.

Finalmente, no me resisto a copiar algo de lo que Sigfrido piensa de su profesión: "...saber escuchar, ayudar en lo posible siempre con discreción y servir las infusiones y los licores con corazón, pensando en la persona que los va a beber..."

viernes, 23 de enero de 2009

Jerusalén1947


Alfonso Zapico, "Café Budapest"
Ed. ASTIBERRI

Se trata de un cómic que mantiene una postura nihilista respecto de la política, la religión, las ideologías, etc. La esencia del cómic es decir que Dios no existe con el único fundamento de atribuirle las acciones libres y más despiadadas de los hombres. Defiende un pacifismo fundado en el amor y la amistad. Es, tal vez, un amor un tanto angelical en el que no existe nunca ningún problema entre marido y mujer, como no sean los derivados de circunstancias externas. Para marcar un cierto realismo en ese amor no le hacían falta tantos desnudos.

Por lo demás, se trata de un muy buen cómic. Entrañable. Bien contado y bien dibujado. Con ambientes. Además pone de manifiesto, de manera difícil de superar, lo absurdo del odio entre árabes y palestinos en la Jerusalén de 1947. Es, sobre todo, el dibujo el que consigue destacar ese absurdo.

Zapico obtuvo, en 2007, un premio en Francia por su primer álbum. Éste, terminado el 14 de Marzo de 2008, lo supera en varios aspectos, incluídos algunos detalles del dibujo. "Café de Budapest" contiene algunos aciertos verdaderamente notables, como la manera de introducir datos históricos, que no es el momento de comentar para no alargarme.

Daré mi resumen: estamos ante un muy buen autor de cómics al que, quizás, le haga falta profundizar más en el comportamiento del ser humano para que sus personajes ganen en matices psicológicos y autenticidad.

lunes, 19 de enero de 2009

Texto inclasificable


Aunque "Poema en viñetas" (Autor Dino Buzzati,Editado por GADIR) obtuvo el Premio Paese Sera al mejor cómic del año, no es propiamente un cómic. Tampoco, como se dice en la portada es una "Novela gráfica", dado que se debe coincidir con Manuel Barrero en el sentido de que unir cómic con novela gráfica es un error. "Poema en viñetas" es, como dice el autor, "un libro de texto y dibujos intercalados", pero, para mí, es inclasificable.

Dino Buzzati ha sido uno de los grandes artistas, sobre todo literato, del siglo XX y se le ha comparado con Italo Calvino. En "Poema en viñetas" combina su capacidad para el dibujo -influenciado por diversos pintores de los que deja constancia-, con su maestría como escritor, que mezcla influencias de Kafka o de Camus en una prosa poética presidida por el simbolismo.

Su dibujo sensual, que incide a veces en el puro erotismo, se matiza por la dimensión fantástica del texto. En efecto, Buzzati, recrea la historia de Orfeo y Eurídice, de manera libre pero profundamente acertada y atrayente.